Cuando las palabras no fluyen: preguntas y respuestas sobre la tartamudez


Cada 22 de octubre se celebra el día internacional del conocimiento de la tartamudez. Dicha celebración fue creada en 1998 por la European League of Stuttering Association con el objetivo de promover la eliminación de la discriminación social hacia las personas que tartamudean y promover oportunidades para que éstas logren alcanzar sus objetivos y aspiraciones.

 ¿En qué consiste este problema que impide a millones de personas hablar con perfecta fluidez? El doctor en psicología José Antonio García Higuera, especialista en tartamudez con varios libros monográficos publicados, y el presidente de la Fundación Española de la Tartamudez, Adolfo Sánchez, ha hablado sobre el tema con la agencia de prensa europapress.es.

1. ¿CUÁLES SON LAS CAUSAS?

El doctor García Higuera asegura que en el tartamudeo hay un componente genético (el caso de padres y hermanos que también tartamudean es muy frecuente), pero que lo que tiene un impacto determinante es la ansiedad que causa no poder hablar como uno quisiera en determinadas circunstancias.

Cuando se produce una situación ansiógena aumenta la probabilidad de bloqueo. Si el bloqueo aparece y por sí mismo produce más ansiedad, se entra en un círculo vicioso que incrementa y perpetúa el problema.

Para los fluidos (las personas que no tartamudean), las palabras acuden de forma automática a la mente, sin ser conscientes de lo que van a pronunciar a continuación, e inmediatamente las pronuncian de forma automática.

Sin embargo, los que tartamudean, cuando van a contar cualquier cosa, temen que aparezca una palabra en la que se pueda producir un bloqueo que le impida hablar fluidamente y analizan las palabras que van a tener que pronunciar para cambiarlas si las temen o, por lo menos, para prepararse a pronunciarlas.

Cuando llega el momento de pronunciar una palabra 'peligrosa', se lanzan con fuerza y con rapidez a pronunciarla y, así, aumentan la probabilidad de bloquearse, porque interfiere en una conducta automática.

2. ¿CUÁL ES LA TERAPIA MÁS EFICAZ QUE SE CONOCE?

García Higuera identifica y explica algunas de estas terapias:

El método Lidcombe sirve para niños hasta los 6 años. Este consiste en que los padres, bajo supervisión y guía de un psicólogo experto en el método, modelen el habla del niño. (Cómo tratar la tartamudez desde la infancia).

Para adultos, el doctor señala dos terapias, diferentes pero no incompatibles entre sí, cuya elección dependerá del objetivo del tartamudo. Si es conseguir la fluidez, la terapia de reversión del hábito de Azrin y Nunn ha demostrado experimentalmente que da resultado.

Esta terapia de reversión propone la detección de en qué consiste el tartamudeo, la aceptación de la ansiedad que produce y el empleo de una conducta incompatible con el tartamudeo. Su problema, indica, es que es difícil de automatizar y en cuanto se deja de aplicar la forma de pronunciar que propone, se vuelve a la falta de fluidez.

La otra terapia es la de 'aceptación y compromiso', que trata de mejorar la vida del tartamudo, cambiando el objetivo de su vida: en lugar de tratar de conseguir la fluidez, se trata de comunicar lo que desea, tartamudee o no, porque el sufrimiento más profundo y trascendente del tartamudo es no conseguir comunicar. Porque, no lo olvidemos, se trata de personas que tienen un deseo tremendo de establecer comunicación, pero piensan que solamente lo podrán hacer cuando alcancen la fluidez.

3. ¿QUÉ PORCENTAJE LOGRA SUPERAR SU TARTAMUDEZ?

Adolfo Sánchez asegura que un alto porcentaje logra "superarla", lo cual no es lo mismo que "curarla" por completo. Erradicarla del todo ni siquiera un 1%, asegura, pero sí que hay muchos que consiguen disminuirla en un 80%.

García Higuera afirma que con el tiempo muchas personas que tartamudean se van atreviendo a enfrentar sus miedos y cuando son adultas su tartamudez influye menos en su vida, aunque el sufrimiento que tienen sigue siendo grande.

4. ¿A PARTIR DE QUÉ EDAD ES MÁS DIFÍCIL SUPERARLA?

Adolfo Sánchez indica que después de los 6 u 8 años es muy difícil superarla. De aquí la importancia de la detección precoz entre los 3 y 4 años.

Recordemos que el método Lidcombe ha demostrado su eficacia para tratar la tartamudez de los niños hasta los 6 años.

5.¿QUÉ CONSEJOS DARÍA A LOS PADRES, FAMILIARES Y AMIGOS?

Adolfo Sánchez enumera:

-Que no le traten distinto

-Que le den tanto amor como tiempo para terminar sus frases

-Que no le terminen las frases

-Que no le corrijan

-Que no le den ninguna importancia a su forma de hablar

-Que acudan a un buen profesional logopeda con su hijo

-Que los padres acudan a un psicólogo para aprender a relacionarse con él

-Aceptarle tal como es, porque en la aceptación esté probablemente el 50% de la curación

García Higuera da tres consejos:

-Que le den tiempo a expresarse

-Que no le interrumpan

-Que no le juzguen

6. ¿QUÉ LE INDICARÍA A UNA PERSONA QUE TARTAMUDEA?

García Higuera responde:

-Acudir a un psicólogo especializado; pero son muy pocos. La logopedia clásica, que no incluye el tratamiento de la ansiedad, no ayuda.

-La terapia psicológica cognitivo conductual es la que ha demostrado experimentalmente que es eficaz en el tratamiento de la ansiedad.

-El punto fundamental para la superación de la tartamudez es poner en el centro de la vida la comunicación, en lugar de los esfuerzos inútiles de conseguir la fluidez.


-La mejora pasa por la aceptación. Que el hablante diga lo que desea sin callarse, sin dejar de enviar el mensaje que quiere que el otro reciba. Que se esfuerce en ello, sin echarse atrás por la vergüenza o el miedo al rechazo. La solución no viene por utilizar 'trucos' orientados a evitar o cambiar palabras. (Fuente: EP)
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